La vida es acelerada. Muchos de nosotros no pensamos en la comida hasta que oímos el ruido de nuestro estómago. Para entonces, es posible que busquemos la comida más rápida, sin tener en cuenta su valor nutritivo. La planificación puede ayudarnos a aliviar el estrés y ahorrar dinero. Esto se debe a que, cuantas menos decisiones tengamos que tomar en el momento, menos estresados nos sentiremos. La planificación de las comidas también puede ayudarte a alcanzar tus objetivos. He ayudado a miles de personas a perder peso, reducir el colesterol, bajar la tensión arterial y reducir los niveles de azúcar en sangre siguiendo estos sencillos pasos. ¡Siga estos consejos y estará planificando y preparando comidas nutritivas y deliciosas que se adapten a sus preferencias y estilo de vida!
Piense en su forma de planificar las comidas: empiece con un día y luego pruebe a planificar una semana seguida.
1..Empieza con el desayuno: busca alimentos que te provean de proteínas como huevos, salchichas de pavo o pollo, yogur griego, requesón y batidos de proteínas.
○ Incluye alimentos ricos en fibra como frutas, verduras y cereales integrales como una rebanada de pan integral o ½ taza de avena cocida.
○ Añade grasas saludables como linaza, semillas de chía, mantequilla de cacahuete y aguacate para sentirte saciado por más tiempo.
2. Para el almuerzo y la cena, asegúrese de incluir entre 3 y 6 onzas de proteína magra, 1-2 tazas de verduras y una opción de almidón. Puedes hacer infinitas combinaciones y utilizar las sobras para comer al día siguiente. Por ejemplo puedes usar 1lb (16oz de pollo) para crear cuatro comidas con 4oz de pollo:
○ Use verduras mixtas y un vinagreta ligera para preparar una ensalada
○ Use una tortilla integral para hacer un wrap
○ Pan integral para hacer un sándwich
○ Acompáñelo con ½ taza de arroz, pasta o patatas con sus verduras favoritas
3. Convierte las sobras en una nueva comida cambiando unos pocos ingredientes.
○ Por ejemplo, añade ½ taza de pasta integral cocida, 1-2 tazas de brócoli y 1 cucharada de salsa Alfredo con un poco de queso parmesano ¡para disfrutar de una pasta con pollo!
4. Ten en cuenta también qué bocadillos vas a necesitar.
○ Utiliza verduras crujientes para sustituir alimentos procesados como las patatas fritas, y frutas para sustituir dulces. Asegúrate de cortarlas y lavarlas para que estén listas para comer. Puedes guardarlas en un recipiente hermético con 1-2 cucharadas de agua o utilizar “bolsas verdes” que absorben el gas etileno para mantenerlas frescas por más tiempo. También puedes utilizar zumo de limón y especias como el tajín, que contiene ácido cítrico, para evitar que los alimentos se pongan el color café.
5. Haz un inventario de los alimentos que tienes en casa y crea una lista de la compra basada en tu plan de comidas
6. Realice un seguimiento de los alimentos y anote los resultados de su plan de comidas
Busca más inspiración:
o Congelando las sobras y guardando productos y carnes congelados para utilizarlos a lo largo de la semana. Asegúrate de descongelar las carnes en el frigorífico antes de cocinarlas.
o Ten en cuenta el tiempo y los alimentos de temporada: la primavera es ideal para preparar frutas y verduras frescas en ensaladas, batidos o a la parrilla. En invierno son ideales las sopas y los guisos para entrar en calor.
o Habla con tu familia para que te den su opinión y ver cómo pueden ayudar.
¿Necesitas más apoyo? Programa una cita con nuestro nutricionista para que te ayude a obtener el máximo provecho de tus comidas durante todo el año. También ofrecemos pruebas de composición corporal y planes de alimentación personalizados para ayudarle a alcanzar sus metas de salud. ¡Llámanos hoy mismo! Número directo: 916-502-6105